03 Feb Entrevista a ANTONIO URDIALES – DIRECTOR DE SOSTENIBILIDAD @COSENTINO
La industria de la construcción es una de las mayores consumidoras mundiales de energía y materias primas. Esto está afectando al medio ambiente: en la UE, la construcción es responsable de alrededor del 40% de las emisiones de CO2 y casi un tercio de todos los residuos. Por eso, pasar de una economía lineal a una economía circular traería enormes mejoras ecológicas. Hablemos de los diferentes retos a los que tendremos que enfrentarnos para lograr una industria más sostenible.
Es hora de que la construcción ponga
en marcha un plan de economía circular. El objetivo de este tipo de economía es
minimizar (o incluso eliminar) los residuos y la contaminación mejorando la
eficiencia y manteniendo los productos y materiales en uso. Para la
construcción, esto abarca todo, desde la fase de diseño hasta la construcción,
el uso y, finalmente, la deconstrucción y el reciclaje.
Un gran reto para lograr la
transición hacia la economía circular es la descarbonización. El sector de la
construcción debe descarbonizarse disminuyendo la intensidad energética en al
menos un 80% para 2030 y ser climáticamente neutro para 2050 para cumplir con
el objetivo del Acuerdo de París de mantener el calentamiento global a 1,5 ° C
por encima de los niveles preindustriales. Esto requerirá avances tecnológicos
para probar diferentes soluciones y acelerar la transición a la
descarbonización.
De hecho, uno de los grandes retos a los que nos enfrentamos está relacionado con las competencias digitales. Avances como la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y el big data continúan transformando la forma en la que nos comunicamos, trabajamos, comercializamos y tomamos decisiones. Hemos creado diferentes cursos para garantizar que nuestros empleados tengan las habilidades necesarias para innovar a la vanguardia de la transformación digital.
Por último, pero no menos importante, otro gran desafío para nosotros es la despoblación, ya que nuestra principal fuerza laboral se encuentra en zonas de interior rural. El éxodo rural se ha desencadenado en Europa desde las primeras décadas de la segunda mitad del siglo XX. Muchas personas, especialmente los miembros más jóvenes de la sociedad, continúan migrando a las ciudades en busca de oportunidades de trabajo, mejores instalaciones y salarios más altos que en el campo.
la superficie mineral definitiva hybriq de cosentino
Con más de 30 años a la
vanguardia del mundo de las superficies para la arquitectura y el diseño,
Silestone®, la marca de referencia del Grupo Cosentino, renueva su identidad
corporativa, simbolizando tanto una transformación externa como interna.
Esta nueva identidad visual
también está en línea con el nuevo carácter responsable y sostenible de
Silestone® gracias a la tecnología pionera y exclusiva HybriQ® desarrollada por
Cosentino. HybriQ® es una innovación tecnológica que establece un nuevo
estándar en el mercado de superficies para arquitectura y diseño y cambia el
paradigma de la llamada categoría de superficies de cuarzo. Implica dos cambios
importantes:
En primer lugar, la tecnología HybriQ® incluye hitos medioambientales propios de Cosentino a nivel productivo, como el uso de un 99% de agua reutilizada de procesos productivos y un 100% de energías renovables.
En segundo lugar, HybriQ® utiliza una nueva formulación híbrida de materias primas minerales y materiales de origen reciclado. En la modalidad HybriQ+®, los colores tienen un contenido de materia prima reciclada o recuperada de más del 20%. Además, esta tecnología permite reducir el uso de sílice cristalina en la composición de Silestone® en un 50%, logrando una reducción de hasta el 90% para algunos colores.
Con esta nueva composición, Cosentino crea un Silestone® con las mismas prestaciones mecánicas y técnicas, que mantiene todas sus certificaciones de calidad e higiene, y con un aspecto que conserva su belleza atemporal, a la vez que aporta nuevas posibilidades de diseño.
Gracias a HybriQ®, el Grupo Cosentino reafirma su liderazgo en el sector y allana el camino para una mayor sostenibilidad al tiempo que contribuye significativamente a la salud y la seguridad en la cadena de valor de la compañía, con un enfoque especial en las personas directamente involucradas en el proceso de producción.